SANTO DOMINGO / REPUBLICA DOMINICANA
Hoy Ultimo día, creo que merece una mención especial Santo Domingo, capital de la republica Dominicana, la cual hemos tenido relegada al iniciar nuestro relato de este crucero inolvidable.
Santo Domingo o Santo Domingo de Guzmán es la primera ciudad fundada por europeos en América. Es la capital de la República Dominicana. Fue fundada en 1496 por Bartolomé Colón en la margen oriental del río Ozama y luego trasladada por Nicolás de Ovando en 1502 a la margen occidental del mismo río (parte que hoy ocupa). Es una ciudad cosmopolita, pujante y está cargada de un profundo pasado histórico asociado a la conquista del continente americano. Es de hecho, la mayor ciudad de la isla de La Española.
La arquitectura espléndida de los siglos XV y XVI en la primera ciudad europea del Nuevo Mundo. A lo largo de las calles de adoquín en la zona histórica colonial, encontrará los primeros ejemplos de una universidad, un hospital y una catedral construidos en las Américas. El Malecón, un paseo ancho al lado del mar, contiene abundantes oportunidades de entretenimiento. Los que van a la playa se deben dirigir a la Boca Chica, una extensión idílica de playa caribeña con agua clara y turquesa.
La historia de Santo Domingo está dividida en un antes y un después de la llegada de los españoles a fines del siglo XV. Santo Domingo fue la primera isla colonizada en el nuevo mundo, no en vano se encuentra en la Isla la Española, y Bartolomé Colón, hermano de Cristóbal Colón, fue el encargado de descubrirla y de colonizarla pocos años después.
Santo Domingo es una ciudad impresionante, en la que no es difícil ver edificios coloniales del Siglo XVI, edificios que se construyeron durante los primeros años de colonia de esta isla y de esta ciudad, de su primer asentamiento. Esta primera colonia se asentó alrededor del Río Ozama, de ahí la arquitectura que hoy día se conserva en esta zona, y de ahí que sea Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
La Catedral Primada de América de Santo Domingo es el primer templo católico de la isla y del continente, a este monumento, en el Siglo XVI se unieron otros como el Alcázar de Colón, residencia de Diego Colón, vástago del descubridor; el Monasterio de San Francisco; el Palacio del Gobernador o la Fortaleza Ozama entre otros. La mayor parte de todos estos edificios constituyen los primeros de su estilo en el continente americano.
Tras la llegada a Santo Domingo y el primer asentamiento europeo, esta isla fue la base desde la cual se continuó descubriendo el nuevo continente, Ponce de León, Hernán Cortés, Núñez de Balboa… hicieron escala en Santo Domingo antes de descubrir el resto del continente.
Un siglo más tarde del descubrimiento, en los últimos años del Siglo XVI, los piratas también se hicieron eco de la existencia de esta isla, Francis Drake invadió la isla, después, ya en el XVII fueron los franceses los que invadieron la isla en lo que hoy se conoce como Haití. Los franceses invadieron todo, incluso la parte que hoy corresponde a Santo Domingo, una situación que duró pocos años, era el siglo XIX y la distribución de la Isla que conocemos hoy día se comenzó a asemejar a la actualidad.
Ya en el Siglo XX, tiene lugar el Quinto Centenario del Descubrimiento de la Española, algo no exento de polémica, también es el siglo en el que el país se asienta, y la ciudad toma su puesto de capital del mismo y de ciudad más importante. Hay que destacar la consagración de diferentes monumentos, de museos y demás, se consagra también la ciudad como un destino turístico de primer nivel mundial, un destino turístico de primer orden en el que turistas llegados de todo el mundo disfrutan de sus playas.
En pleno siglo XXI como estamos, se puede decir que Santo Domingo es una ciudad turística, repleta de hoteles, de hostales y de apartamentos donde alojarse, repleta de resorts turísticos, de playas caribeñas que son un paraíso para los amantes del sol y la playa, es un lugar impresionante en el que poder disfrutar de sus vacaciones en el Caribe.
Después de este pequeño relato volvamos a lo nuestro.
La llegada esta pronosticada para las diez de la mañana, por lo que nos alistamos a desayunar con toda la calma y así poder subir a cubierta a ver el atraque, el equipaje ya fue retirado desde la noche anterior, por lo que solo disponemos del equipaje de manos.
La tristeza realmente invade de una manera u otra, hasta del personal del barco, da tristeza despedirse, pues realmente el trato es muy especial y personalizado, ya que su camarero siempre es el mismo, tanto en la cabina como en el comedor formal, con ellos se habla, te dan consejos y recomendaciones, te miman y contemplan, se vuelven unos colegas para que tu crucero sea todo placer.
Si hay algo de admirar en un crucero es el servicio en todos los rincones del barco.
Pero la realidad es una sola, esto se acabo. Nos llevamos los mejores recuerdos de todas sus islas y momentos vividos, agradezco desde aquí a todos los que hicieron posibles esta aventura, la agencia de cruceros en Dallas, Texas. Avianca por su buen servicio y puntualidad, personal de hotel en Santo Domingo hicieron hasta lo imposible por complacernos, agencia rent/car esplendido su servicio, todo el personal del crucero y en especial a CECI por su deliciosa compañía.
Ya desembarcados recogemos las maletas y nos disponemos a tomar un taxi al aeropuerto, a esperar nuestro vuelo de regreso a casa, mientras tanto siendo las 4:30 decidimos almorzar algo en el aeropuerto, y como toda regla tiene su excepción, pues pedimos dos hamburguesas doble carne y doble queso mas papitas fritas y Coca-Colas grandes, solo 9 dólares, nueve (diez y ocho mil pesos) todo, y yo que decía que la comida en Santo Domingo era costosísima.
Pasamos a inmigración y nos damos unas vueltas por los duty free, donde compritas de última hora, más un sanduche de jamón serrano algo que no puedo resistir, con una de las mejores cervezas, la dominicana “Presidente” muy de nuestro agrado y la misma que servían en el crucero durante todo el recorrido.
Se llega la hora de abordar y despedirse ahora sí, de unas maravillosas vacaciones.
Despegamos rumbo a Bogotá, y nos acompaña un atardecer impresionante por más de 40 minutos, después la noche, llegada traslado al puente aéreo y abordar a Medellín, a casita que también a pesar de todo jala demasiado, legamos a la casa a las doce de la noche, cansados. Sebas y Crazy nos esperan, el no, pero ella se orina de la emoción al vernos.
Bueno a dormir, esperemos el otro pues esto me gusta…………