Manuelgonzalezh: Crucero Caribe dia 7

Septimo dia,

Bienvenue a Pointe a pitre / Guadeloupe

Estrictamente hablando, Guadalupe consiste en dos islas que son “Grande Terre” y “Basse Terre”, se paradas por un estrecho canal llamado “Riviere Salee”. Como departamento extranjero Francés, Guadalupe administra las islas circundantes ”Marie Galante”, “Desirade” y “les Saintes” así como dos islas distantes “san Martin” y “San Barthelemy”.

Su capital, Pointe a pitre es el corazón comercial e industrial de la isla, la ciudad tiene una apariencia moderna y sus calles comerciales están llenas de vida, los visitantes podrán encontrar también artículos de lujo de todo tipo, y en sus estrecho y pintorescos comercio, artesanías típicas de la isla.

Estamos en cubierta viendo la llegada al puerto de Guadalupe, y un tímido pero suave y agradable amanecer, desde lejos se vislumbra la isla, como con mas ciudad, se ven más edificios y construcciones grandes, también podemos observar desde la misma cubierta que nuevamente estaremos en una ciudad limpia y llena de vehículos, algo ya normal en estas islas, hay más vehículos que habitantes, sin embargo todos ellos son nuevos o de modelos muy recientes y bien conservados. Observamos que en puerto ya hay ventas de productos típicos muy coloridos.

Nos apresuramos a organizarnos para un buen desayuno y bajar a turistear pues promete ser muy folclórica.

Desembarcamos y efectivamente nos reciben folclóricamente con puestos de especias de todo el mundo, parece la especialidad de la isla, música local en vivo. Por lo que empezamos nuestro recorrido por aquí, vainas de vainilla, pimientas rojas, verdes, amarillas, negras una gran variedad, más azafrán, cilantro, ajos, curry etc. Huele que hasta marea. Damos una vuelta por todos los puestos encontrando también artesanías y pedrería local muy bonita.

Salimos del muelle y nos dirigimos una cuadra hacia adentro donde se encuentra ya el centro comercial de la ciudad, lo primero que encontramos es una plaza llena de puestos de especias de todos los tipos ya no tan cache como la del muelle pero llena a reventar de especias, curioseamos y dejamos separado nuestro paquetico, para no cargar con ellas todo el rato ya que apenas comenzábamos.

Cojemos por unas calles tipo más guayaquilito, con comercio de baratijas, porque tampoco se veían muy finas. En unas de esas veo un almacén de Casio, marca que fabrica una cámara de alta velocidad que no había podido conseguir, pues me dirijo allí que la intención de curiosear y ver si la tienen, bueno empiezan relojes, organetas, calculadoras, se me va quitando la ilusión, cuando al fondo en una sola vitrina llena de cámaras fotográficas, pregunto por las HS (high speed) pero el empleado solo habla francés, pues a practicar ( no sé si en inglés, español o que revoltijo le hable pero logramos entendernos) y me mostró exactamente la que yo buscaba y no había podido encontrar ni en Panamá, el palacio de las cámaras. Después de lograr en ese idioma indefinible que me rebajar para que me quedar como si fuera duty free, resulta que tengo que explicarle que el efectivo que tengo encima no me alcanza, para colmo el precio es en Euros lo que resulta un poco más caro, le pregunto que si recibe tarjetas, y así salí corriendo al crucero para llamar a la artillería que acudiera en mi ayuda, las Benditas tarjetas de crédito.

Ya armado con ese poderoso plástico, logre compra mi deseada cámara 1000(mil) cuadros por segundo en video y 30 (treinta) fotos en un solo segundo, mas todos eso modernismos hasta 48x de zoom, rostro, etc.

Estaba feliz, pero la pila estaba descargada…. Paciencia…..sigamos con la viejita, que ya celosa no quería ni trabajar, (o seria yo?) Claro que increíble, no había o al menos no pudimos encontrar otro almacén de cámaras fotográficas de ninguna marca en la ciudad,

Como siempre he dicho que “al que le van a dar le guardan” pues estaba todavía más feliz.

Claro yo feliz con mi bolsita pero resulta que Doña Ceci no había empezado a curiosear por lo que vamos de tienda en tienda con toda la paciencia del mundo, pregunte aquí toque allá, pero nada la convence y me recuerda como le había gustado la ya mencionada hoja de madera, me tocaba aguantar y tragar saliva.

Siga viendo más y más almacenes, y ahora por aquí, que no hemos estado, (si supiera que yo, solo quería ir al crucero a cargar la pila)hasta que al final se cansó y acepto volver para almorzar y piscinear, bueno nos devolvimos por nuestras especias y al barco.

Subimos y corra a poner a cargar la pila, mientras tanto vamos a almorzar para luego poder ir a la piscina, lógico a ensayar la cámara, aunque en el almuerzo ojeando el manual, grande como un directorio, pero por la cantidad de idiomas, pues solo traía las instrucciones para prender y disparar, súper simplificado y un CD con archivo PDF donde se explica el funcionamiento de manera detallada, así que prendamos y disparemos haber que sale.

De alguna manera me arriesgo y veo como el zoom tiene ventajas de discreción para fotografiar las chicas al otro lado del crucero, también las que se asolean y en un solo clip salieron 30, que mejor que un poquito de zoom para no ser indiscreto con las gorditas y no ofenderlas.