PARÍS, Mayo 21 y 22.
2018
2018
Hoy partimos de Londres, iremos de Londres a París en el famoso Eurostar, tren el cual cruza el Canal de la Mancha por un túnel submarino (34 kilómetros bajo el mar).
Desayunamos y salimos en compañía de Manuel hasta la estación St Pancras lugar de donde parte el tren rumbo a la estación Paris Gare du Nord en París.
Cuando estaba programando este viaje no me decidía si ir en avión o en tren a París, viendo también el menor costo, pero Manuel nos sorprende, y me dijo no lo pienses más, ya les compre de regalo los tiquetes en el tren, al fin y al cabo en avion ya hemos montado mucho, y atravesar el Canal de la Mancha por un túnel submarino y en tren nunca, sería una experiencia única.
Llegamos a la estación y aquí nos despedimos de Manuel, pero será solo por tres o cuatro días ya que él se nos volverá a unir en todo el recorrido por Italia, nos caerá a Roma en nuestro segundo día, para acompañarnos hasta Venecia.
Bueno salimos rumbo a París por tierra y atravesamos varios túneles pero el más importante el del Canal de la Mancha me sorprendió, dura solo unos 18 a 20 minutos, nos dimos cuenta por que al salir en Francia, cambia inmediatamente el reloj del tren, pone la hora de Francia.
El viaje completo Londres-París dura más o menos 2 horas 25 minutos, no es un tren de alta velocidad como el AVE en España, este da unos 140 km/h contra 300 en promedio que hemos viajado en AVE, pero los vagones si son super cómodos y modernos, tambien no esperen sentir nada, es como si nunca bajara y volviera a subir.
Llegamos estamos en París, estación Paris Gare du Nord, yo ya tenía más o menos como llegar por transporte público Metro y Bus al Hotel Ibis Budget cercano al aeropuerto Charles de Gaulle, pero algo retirado del centro de París, ya que la cercanía al aeropuerto era de suma importancia para poder salir muy temprano en el vuelo hacia Roma.
Empieza la primera mala impresión, con solo bajarnos del tren, en la misma estación, suena por los altoparlantes en Inglés, Español y Francés tener mucho cuidado con los carteristas.
Toca arriesgarse salgo para la estación del RER, para tratar de tomar un Metro hacia el aeropuerto, también nuevamente el mismo mensaje por los parlantes, es más estando ya esperando el metro, de pie con la maleta totalmente al lado pero suelta, otro pasajero se me acercó y me dijo cógela no la suelte, no parecía estar en Europa.
De aqui hasta la estación Gare du Parc des Exposition, bajarse y tomar un bus #349 tres paradas y bajarse en Parc des Nations, ya aquí se divisa el hotel, caminar unos 100 metros y no me pregunten como, pero llegamos.
Nos registramos, y subimos a la Habitación, esta es igual en todos los Ibis, es increíble la misma distribución, colores e igual de agradables, por algo es mi cadena de hoteles preferida, algo más siempre hablan Español, esto último lo aproveche para investigar cómo ir y volver de París.
Ya la recepcionista me informa que el hotel tiene un servicio de bus gratuito al aeropuerto cada 20 minutos, este es ida y regreso, de 5 am a 11:30 pm, yo por ignorante me baje del metro para coger bus. Tambien pague desayuno para el dia siguiente, ya que el hotel esta retirado del centro de la ciudad.
Ya acomodados y con la información necesaria nos disponemos para tener nuestro primer contacto con París, solo salir del hotel y el bus listo para partir, una moderna buseta con porta equipaje, nos montamos y rumbo al Aeropuerto, tratar de ver donde nos dejaba pues ahi mismo lo cogeriamos de regreso.
Los trenes RER de la línea B comunican el Aeropuerto de Charles de Gaulle con el centro de París en aproximadamente media hora.
Hasta aquí todo muy bien, pero hay que comprar los tiquetes, medio chapoteando el Inglés pues estos Franceses tampoco les gusta mucho, logré entender que me salia mas economico comprar una tarjeta para una semana que cuatro hoy y cuatro mañana, como esas tarjetas no las venden las máquinas automáticas pues fui a la taquilla.
Segunda mala impresión, los franceses son desatentos, fui a comprar las dos tarjetas, nada baratas por cierto, pero igual que en Londres la podía usar sin límite, pero la muchacha que las despacha me pidio una foto mia y otra de Ceci, algo que no tenía en ese momento, no hubo manera que me la vendiera, que fuera a la máquina a tomarme las fotos, con tan mala suerte que la máquina estaba dañada.
Segunda mala impresión, los franceses son desatentos, fui a comprar las dos tarjetas, nada baratas por cierto, pero igual que en Londres la podía usar sin límite, pero la muchacha que las despacha me pidio una foto mia y otra de Ceci, algo que no tenía en ese momento, no hubo manera que me la vendiera, que fuera a la máquina a tomarme las fotos, con tan mala suerte que la máquina estaba dañada.
Volvi y esta vez logré hablar con alguien en Español, una Madrileña que trabajaba ahí, le conté el caso y me dijo; bueno cuantas quiere?, mañana le pone la foto y listo, una tarjeta de una semana para usarla dos días, nos fuimos para París.
Como es nuestra primera incursión y ya es medio día, programamos visitar solo parte de la ciudad, Notre dame y visitar el río Sena.
Cogimos el Metro hacia la estación Saint-Michel - Notre Dame, es una estación de la París RER , sirviendo a la línea B y la línea C. Lleva el nombre de la cercana zona de St-Michel y la catedral de Notre Dame .
Ya con el río Sena y la Catedral de Notre Dame al fondo, fuimos caminando hacia Notre Dame, la verdad a mi me decepciono, esperaba algo más asombroso y confieso es la catedral o iglesia más sencilla que vi en todo el viaje.
Construida entre 1163 y 1245 en la Île de la Cité, la Cathédrale de Notre Dame de París es una de las catedrales góticas más antiguas del mundo. El nombre de la catedral significa Nuestra Señora y está dedicada a la Virgen María.
La Catedral Notre Dame de París es, sin ninguna duda, uno de los símbolos de la ciudad. Si bien no es la catedral más grande de Francia, es una de sus obras de arte gótico más remarcables.
Situada en la parte este de Ile de la Cité, su fachada mira hacia el oeste y da sobre la plaza Notre Dame, donde se encuentra el punto cero desde el que se cuentan todas las distancias de Francia.
Ya que estamos por aquí, aprovechamos para pasear un poco por sus calles y avenidas, gran edificio al frente y al costado de la plaza de Notre Dame.
Teniendo en cuenta que nos encontramos en Ile de la Cité (isla de la ciudad) le daré otra oportunidad mas adelante al famoso río Sena, supongamos que este es solo un brazo de dicho río, pues la verdad es mas ancho el río Medellín.
Algunas calles si muy señoriales dignas representantes de una ciudad, no entiendo porque el parque y casi toda la alameda del Sena esta en tierra.
Estatua en el parque de no se que Rey Francés, casi pensé que era del Quijote, por lo grotesca.
Siendo este nuestro primer contacto con París, era mejor emprender el regreso, ya que no sabíamos ni siquiera donde estábamos, pero para eso estamos aprendiendo, buscamos una estación del metro con line B al aeropuerto despues se supone es pan comido, esperar la buseta del hotel y listo.
La buseta de regreso al hotel pasa por un lugar del aeropuerto donde tienen exhibido "El Concorde" el famoso avión supersónico, es más pequeño de lo que suponía, pero con el costo de los pasajes en este avión para ir de Paris a New York en 2:30 horas no creo volara full pasajeros muchas veces.
No les habia contado pero resulta que París es la mata de los supermercados Carrefour, donde yo me aprovisionó de chorizo, queso, jamón, pan FRANCÉS y bebidas, me empiezo a acelerar por llegar al hotel esta será mi anhelada cena, con un atardecer visto desde la ventana hermosisimo (son las 9:30 pm)
Hoy es nuestro segundo día en París, bajamos a desayunar en el buffet del hotel ya que para llegar al centro de París lo calculamos mínimo en una hora, Salimos nuevamente ya conocedores a tomar el bus del hotel rumbo al aeropuerto, algo que religiosamente sucede cada 20 minutos.
Ya conocedores fue fácil ubicar el Metro, y poner rumbo a la Torre Eiffel para ser nuestra primera parada, como en todas partes en París también se presentan problemas, resulta que aparentemente uno de los trenes del Metro se averió en mitad de la vía, por lo que nos tocó hacer transbordo y luego esperar que pasara un tren en sentido contrario para poder seguir el nuestro, esto pues demoró algo más la llegada a la torre.
Como ven estos cambios también nos dieron la sorpresa y montamos en un Metro de dos pisos, yo la verdad ni siquiera sabia que existian, ahora si la Ceci disfruto de los buses Londinenses y los metros Parisinos de dos pisos, lógico nos fuimos arriba.
Salimos de la estación y se divisa la famosa Torre Eiffel, esta como a dos cuadras así que emprendimos nuestra caminata, de lejos se ve hermosa impresiona, poco a poco nos vamos acercando, su altura es tres veces superior a nuestro edificio Coltejer..
Al no tener ningún edificio alto en sus cercanías le favorece mucho a la vista, bueno llegamos y si, muy alta, mucho hierro, y mucho despelote están como parece todo Europa en remodelación de muchas partes, lo que le quita algo de su imponencia.
Teníamos que tomar un tente en pie, por lo que decidimos hacerlo en los bajos de la torre, aquí se encuentran pequeños locales con diversas comidas, nosotros aprovechamos para cargar energías con unas donas gigantescas con café con leche, eso sí sentados debajo de la torre en una banca.
Visitar obligatoriamente los servicios sanitarios, otros que se encontraban en reformas y con costo, pero el de mujeres con fila interminable, claro que Ceci con su bastón fue dirigida inmediatamente al de discapacitados, al menos salió en un segundo.
Varias vueltas por uno y otro lado de la torre hasta que decidimos dirigirnos a el Arco del Triunfo, otro de los lugares de París que teníamos que visitar.
Con esto momentáneamente dimos por concluida nuestra visita, algo casi que obligada en París, la Torre Eiffel, en mantenimiento y reformas, con muy poca afluencia de turistas, algo que nos sorprendió.
Emprendimos camino hacia el Arco del Triunfo, como está cerca pues fuimos conociendo y caminado lentamente nos fuimos arrimando al famoso Arco.
El Arco del Triunfo de París (Ya que también hay en España, Italia, Alemania, México, Rusia, etc.) es uno de los monumentos más famosos de la capital francesa y probablemente se trate del arco de triunfo más célebre del mundo. Construido entre 1806 y 1836 por orden de Napoleón Bonaparte para conmemorar la victoria en la batalla de Austerlitz,.está situado en el extremo occidental de la avenida de los Campos Elíseos.
Siendo otro de los puntos obligados a visitar en París, nuevamente nos sorprende la poca afluencia de turista.
Ya estando aquí, pues estamos en la famosa avenida de los Campos Elíseos, aunque la Ceci fue dificil de convencer que estabamos ahi. Para mi fue fácil reconocerla ya que todos los años la veo en el final del Tour de Francia.
Aunque hasta la placa en la esquina demuestra algo de abandono para ser una avenida de tanta importancia, donde se encuentran los más afamados almacenes de París.
La historia de los Campos Elíseos comienza en 1640 con la plantación de una gran alineación de árboles en lo que posteriormente se convertiría en la avenida. El nombre de los Campos Elíseos procede de la mitología griega y designaba un lugar equivalente al Paraíso cristiano.
No solamente son los lujosos almacenes, también encontramos extravagancias como tres vehículos deportivos de alta gama, Mustang, Maserati, Ferrari, nunca supe si los alquilaban, exhibían o que pretendían con ellos.
Encontré en la misma avenida un Renault Sport, que me recordó mis diez y ocho años trabajando para esa marca, tambien con precios Campos Elíseos.
Así que continuamos para darle otra oportunidad al río Sena, esta vez caminaremos por la alameda en tierra que recorre una de sus orillas, una alameda agradable, amplia y larga a la orilla del río por donde caminamos un largo trecho.
Pero más o menos en este punto (foto) una mujer de unos 55 a 60 años aparentemente libanesa, pega un ligero grito llamando la atención, se agacha y recoge un anillo, entonces nos pregunta, será de oro? y me entrega un brillante anillo, grande y pesado, para examinarlo, yo lo único que le dije; puede ser, y se lo devolví (estaba muy bien brillado).
Pero aquí solo comienza la historia , empieza a echarnos el cuento que es viuda, que su religión no le permite tener joyas, bueno preguntar de donde eramos, etc, etc. que más bien me regala el anillo, yo como buen paisa (así sea por adopción) no podía dejarme meter el cuento, le seguí la corriente y tome el anillo.
Después de semejante cuento, empezamos a despedirnos para continuar nuestro paseo, entonces se viene lo más esperado, No me regala un Euro para una Coca Cola? Yo inmediatamente le dije que ni un centavo, ella insistia hasta que al final me dice: entonces devuélvame el anillo! ja ja ja eso es París está lleno de carteristas y estafadores.
Creo que entendimos perfectamente las advertencias en las estaciones, parece que el problema de seguridad es mayor de lo esperado, muy triste. También en esta alameda percibimos poco afluente de turistas y al final un grupo de chicas pidiendo una colaboración para no se que de muchachas necesitadas, bueno este es otro de las grandes y famosas estafas Parisinas, te piden datos y firmas etc. para ver con cuanto colaboras, puro cuento esto es famoso en París , que tristeza.
Les ofrecí unas monedas que tenia en el bolsillo y casi me linchan, que lo mínimo eran 15 Euros, increíble en una estafa reconocida en la ciudad, algo que te previenen en los blog de viajeros.
Barcazas llenas de turistas haciendo el recorrido (otro tumbis), aun así esta no es la vista más agradable del Río Sena, más bien se ve algo despelotada como muy desorganizada.
Me gustan mucho más esta otra, que vimos más adelante, mucho más relajante y agradable, definitivamente me quedo con la paz y tranquilidad, claro sin estafadores.
Después de este paseo por la alameda del Río, nos dirigimos poco a poco hacia el Museo de Louvre, no sin percatarnos que la torre Eiffel está allá, lejana a nuestras espaldas.
El Museo del Louvre es el museo nacional de Francia consagrado al arte anterior al impresionismo, tanto bellas artes como arqueología y artes decorativas. Es uno de los más importantes del mundo.
Como todo el mundo pues Yo también tengo mis gustos, aunque reconozco la belleza en esas obras talladas en mármol, y admiro la habilidad del que es capaz de hacer semejantes obras, también se que no es lo que más me emociona, prefiero el museo de dinosaurios, ciencias, etc.
Aun así es impresionante la cantidad y calidad de las obras expuestas en Louvre, toneladas por todas partes.
Pero como bicho raro que soy, me encanto la plazoleta central del Museo, inmensa con fuente, sus pirámides de vidrio, con sus enigmas y leyendas, estas cosas raras si me gustan y entusiasman.
Y allí, de pie en la amplia explanada que da acceso al famoso Museo del Louvre, se contempla la enigmática pirámide de cristal, “hall” de acceso al mismo, formada por 666 cristales, tres más pequeñas y la pirámide invertida en el interior.
Seiscientos sesenta y seis. El número bíblico del Anticristo. Esa es la “leyenda urbana” que, después de todo, parece ser realidad. Si a esto le sumamos que fue mandada construir por indicaciòn del que fue máximo mandatario francés, François Miterrand, conocido por sus inquietudes esotéricas, la cosa se aleja dramáticamente de la posibilidad de una “casualidad”.
Como podrán ver estas cosas me emocionan mucho mas, repito sin dejar de reconocer la belleza y majestuosidad de las obras de arte.
Nuevamente aquí en Louvre observamos poca afluencia de público, que será lo que pasa?
También desde aquí observamos la famosa Torre Eiffel, esa plazoleta me gusto, pero bueno es hora de ir recortando, y alistarnos para el regreso al hotel.
Otra vez, cada vez con mejor conocimiento cogemos el Metro linea B al aeropuerto, donde vemos una señora llevando un lindo perrito, ustedes saben como soy amante de los animales.
Ahora sí, ya en la buseta del hotel, mañana rumbo a Roma, como el vuelo es temprano decido contratar un shuttle, un servicio de transporte en minivans que lleva a las personas del aeropuerto directamente a la puerta de su hotel o desde su hotel al aeropuerto, la opción más cómoda y accesible, una excelente alternativa a los altos costos de los taxis.
Este blog si quedo mas largo y pesado que la famosa novela "Cien años de soledad" sera que pasa lo mismo que yo digo de la novela, eso no lo lee nadie, aún así París me quedo debiendo y mucho, no me entusiasmó en lo más mínimo es más la bulla, también puede ser que esperaba otra cosa, algo más despampanante, fuera de todo muy costosa, creo que no volvería. No se lo recomiendo a nadie hay mil lugares mejores para visitar.
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